El Movimiento Saharaui por la Paz, una facción disidente del Polisario, ha instado a las Naciones Unidas a intervenir para detener los asesinatos de saharauis en los campamentos de Tinduf, atribuidos al ejército argelino. «Manifestamos nuestra profunda preocupación por el alarmante deterioro de la seguridad en los campamentos de refugiados saharauis en territorio argelino», señala el MSP en una carta dirigida a António Guterres.
«Una nueva tragedia ha golpeado a nuestro pueblo: dos jóvenes saharauis fueron asesinados a sangre fría por soldados argelinos. Lamentablemente, estas violencias no son incidentes aislados. Los saharauis en los campamentos sufren regularmente disparos, intimidaciones y brutales represiones por parte de las fuerzas argelinas», advierte la carta del MSP.
Frente a esta crisis humanitaria y de seguridad, el MSP hace un llamado urgente a la Organización de las Naciones Unidas y a la MINURSO para que actúen de inmediato y protejan a los civiles saharauis en los campamentos», enfatiza el texto del movimiento. La misiva también exhorta «a la comunidad internacional, a las organizaciones de derechos humanos y a los medios de comunicación a romper el silencio y denunciar estos actos de violencia».
El Movimiento Saharaui por la Paz ha reiterado su petición, formulada en múltiples ocasiones a la ONU, para ser incluido en las futuras negociaciones sobre el Sahara Occidental. Argumentan que el MSP es un «movimiento pacífico y moderado que representa a una parte significativa de la población saharaui, aspirando a una solución política negociada, alejada de los métodos violentos del Frente Polisario».
La semana pasada, el ejército argelino desplegado en los campamentos de Tinduf mató a tres saharauis: dos buscadores de oro de la tribu Oulad Dlim y otro de los Rguibates-Bouihates, este último abatido en su propia khaima.