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El jefe de gobierno marroquí, Aziz Akhannouch, arribó el domingo a Sevilla para representar al rey Mohammed VI en la cuarta conferencia internacional sobre financiación del desarrollo. Durante su visita, participó en la cena ofrecida por el rey Felipe VI de España y la reina Letizia, en honor a los líderes mundiales presentes en el evento.
La delegación marroquí que asiste a esta conferencia incluye a la ministra de Economía y Finanzas, Nadia Fettah, al embajador y representante permanente de Marruecos ante la ONU, Omar Hilale, y a la embajadora del reino en España, Karima Benyaich. Se espera la participación de cerca de 70 jefes de Estado y de gobierno en la capital andaluza, junto a 4,000 representantes de organizaciones de la sociedad civil, instituciones financieras internacionales y del sector privado.
Según el secretario general de la ONU, António Guterres, el objetivo es abordar la urgente necesidad de financiamiento de los países en desarrollo, que enfrentan un déficit anual estimado en 4,000 millones de dólares, es decir, 1,500 millones más que hace una década.
Bajo los auspicios de las Naciones Unidas, la conferencia, que se celebra del 30 de junio al 3 de julio, busca ser una plataforma para reformar un sistema financiero internacional que, según Guterres, se ha vuelto obsoleto. Esta cita representa una oportunidad para acelerar la implementación de la Agenda 2030 y promover reformas en la arquitectura financiera global.
El proyecto de declaración, conocido como Compromiso de Sevilla, debería abogar por una mejor representación de los países del sur en las instituciones financieras mundiales, triplicar la capacidad de préstamo de los bancos de desarrollo y fortalecer la cooperación contra la evasión fiscal.
