En Essaouira, del 19 al 21 de junio, la música impregnó cada rincón de la ciudad. Los guembris entablaron un diálogo vibrante con los tambores senegaleses, mientras las voces gnaoua se fusionaron con las vibraciones del jazz y los ritmos afro-cubanos. Durante estos tres días de celebración, el Festival Gnaoua y Músicas del Mundo congregó a más de 300,000 personas en un ambiente cargado de memoria y humanidad.
En los callejones, en la playa o frente a los escenarios, la diversidad era palpable: familias de Essaouira, jóvenes de otros lugares y viajeros curiosos se unieron en una mezcla única, tanto en el escenario como entre el público. Un total de 350 artistas de una docena de países —Marruecos, Senegal, Túnez, Nigeria, Malí, Siria, Irak, Francia, Estados Unidos, Turquía, Costa de Marfil y Cuba— compartieron un idioma común: el de la música. Marruecos fue el corazón palpitante de esta edición, impulsado por sus Maâlems, sus sonidos y sus tradiciones en constante evolución.
Desde la apertura, Hamid El Kasri y la Compañía Bakalama establecieron el tono: fusión, encuentro y generosidad. Hasta el final, artistas llegados de todos los rincones del mundo hicieron vibrar la ciudad. Cimafunk, CKay, Dhafer Youssef, Fehd Benchemsi y Khalid Sansi, entre otros, dejaron su huella imborrable.
©Yassine Toumi / DR
El festival también fue un espacio para la reflexión. El Foro de los Derechos Humanos, organizado junto con el Consejo de la Comunidad Marroquí en el Extranjero, reunió a escritores, investigadores y artistas en torno al tema «las migraciones y las dinámicas culturales». El director palestino Elia Suleiman emocionó al público al recordar «la necesidad de moverse, a pesar de los muros». Otras voces destacadas fueron las de la poeta Véronique Tadjo, el historiador Pascal Blanchard, el cineasta Faouzi Bensaïdi y el escritor-ensayista Elgas.
Momentos únicos permitieron a los Maâlems dialogar con académicos, gracias a la Cátedra UM6P. Fueron intercambios sin filtros, en un nivel profundamente humano, donde la trance y el conocimiento se escucharon mutuamente.
La próxima cita está programada del 25 al 27 de junio de 2026. Entre las murallas y el océano, la música seguirá rompiendo fronteras.