El Foro Empresarial Marruecos-Francia Copa del Mundo 2030, celebrado el jueves en el Complejo Mohammed VI de fútbol en Maâmora, representó un avance significativo en el fortalecimiento de las relaciones económicas entre Rabat y París, especialmente en el ámbito de la economía deportiva. Este sector, en plena expansión, se ha convertido en un eje central de la cooperación bilateral, según afirmó Laurent Saint-Martin, ministro delegado francés encargado del Comercio Exterior y de los Franceses en el Extranjero.
«La economía del deporte está experimentando un notable dinamismo, impulsado por la voluntad compartida de Su Majestad el Rey Mohammed VI y el presidente Emmanuel Macron, manifestada durante la visita oficial de este último a Marruecos el pasado octubre», declaró en la inauguración del Foro. «Este sector no solo ofrece grandes perspectivas para nuestros dos países, sino también para todo el continente africano.»
El foro, organizado conjuntamente por la Federación Real Marroquí de Fútbol (FRMF), Bpifrance y la Confederación General de Empresas de Marruecos (CGEM), busca fomentar la reflexión conjunta y establecer puentes concretos entre los ecosistemas económicos de Marruecos y Francia. El objetivo es generar oportunidades de negocio de cara a la Copa del Mundo 2030, que Marruecos coorganizará junto a España y Portugal.
Laurent Saint-Martin subrayó que la inclusión de Marruecos y Francia en el selecto grupo de países anfitriones de grandes eventos deportivos no es casualidad. Recordó, por ejemplo, la Eurocopa 2016, la Copa del Mundo de Rugby 2023 y los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de París 2024 organizados por Francia.
«Marruecos, por su parte, se prepara para un calendario deportivo particularmente intenso, organizando durante cinco años consecutivos la Copa del Mundo Femenina Sub-17, una primicia mundial, además de la CAN femenina el próximo julio y la CAN masculina, un verdadero trampolín hacia el Mundial 2030.»
Más allá del deporte, el ministro francés destacó la importancia de integrar principios de sostenibilidad en la organización de estas competiciones. «El negocio puede y debe ser un motor de inclusión y transición ecológica. Nuestros dos países comparten una fuerte ambición en materia de descarbonización e innovación.»
El presidente de la FRMF, Fouzi Lekjaa, resaltó el alcance estratégico del modelo de desarrollo iniciado por Su Majestad el Rey Mohammed VI, «que coloca a la juventud en el centro de una dinámica que articula el progreso económico con el desarrollo social».
«Lo que une a Francia y Marruecos va mucho más allá de los eventos. Es una relación basada en una historia común, un patrimonio mediterráneo compartido y un modelo de cooperación civilizacional», enfatizó. Según él, la celebración de eventos deportivos de gran envergadura contribuye a reforzar este legado común y a transmitirlo a las futuras generaciones.
Mehdi Tazi, vicepresidente general de la CGEM, destacó el contexto prometedor que vive actualmente Marruecos. «Estamos en un momento crucial. El Reino, bajo el liderazgo de Su Majestad el Rey, está experimentando una transformación profunda a través de una serie de proyectos estructurales.»
Mencionó especialmente los proyectos de infraestructura (puertos, aeropuertos, autopistas), las inversiones en energías renovables y la desalinizacion del agua de mar como señales positivas para los inversores extranjeros.
El seleccionador nacional, Walid Regragui, concluyó elogiando «la nueva energía» que anima al país gracias al protagonismo otorgado a la juventud y al deporte, esperando que Marruecos ofrezca en 2030 «la mejor edición de la historia de la Copa del Mundo».