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El último informe del Alto Comisionado para el Plan (HCP) revela que la economía marroquí experimentó una desaceleración en su crecimiento durante el cuarto trimestre de 2024, alcanzando un 3,7% en comparación con el 4,2% registrado en el mismo periodo del año anterior.
Este comportamiento se explica principalmente por una fuerte demanda interna, aunque en un contexto marcado por el control de la inflación y un aumento en las necesidades de financiamiento de la economía. Los diferentes sectores mostraron las siguientes tendencias:
Sector primario: El valor añadido se redujo en un 4,7%, con una caída significativa del 4,9% en la agricultura, mientras que la pesca registró un leve incremento del 0,8%.
Sector secundario: El crecimiento se desaceleró al 4,9%, destacando una notable ralentización en la industria extractiva (6,5% frente al 16,1% del año anterior) y en la manufacturera (3,7% frente al 7,4%). Por otro lado, las actividades de construcción y obras públicas mostraron un avance considerable (7% frente al 2,9%).
Sector terciario: Este sector registró un crecimiento del 4,2%, impulsado por un notable incremento en el alojamiento y la restauración (12,8%), así como mejoras en los servicios públicos, el comercio y la educación/salud.
En términos generales, el valor añadido de las actividades no agrícolas aumentó ligeramente, pasando del 4,3% al 4,4%.
Considerando un incremento del 6,7% en los impuestos netos de subvenciones sobre los productos, el PIB en volumen creció un 3,7% en el cuarto trimestre de 2024.
En precios corrientes, el PIB aumentó un 6,2%, reflejando un incremento del nivel general de precios del 2,5%, lo que indica un control de la inflación en comparación con el año anterior.
