El pasado lunes por la noche, la Sala Correccional del tribunal de Rabat dictó una sentencia de ocho años de prisión para el asistente de un conductor de autobús, conocido comúnmente como «gresson», por los delitos de violación y robo.
Esta sentencia llega después de que se comprobara una serie de crímenes perpetrados por el acusado contra mujeres en Rabat y Casablanca. Según los detalles revelados, el individuo engañó a su primera víctima haciéndole creer que tenía intenciones de casarse. Posteriormente, la llevó al bosque del Cinturón Verde, cerca de la estación de autobuses entre Rabat y Témara, donde la sometió a violación bajo amenaza, y luego le robó sus joyas, su teléfono y 100 dirhams. Utilizó el mismo ardid para atraer a una segunda víctima, a quien también llevó al mismo lugar y sometió al mismo destino, según informó el periódico Assabah.
Las investigaciones han revelado que el acusado cuenta con un amplio historial delictivo que incluye violación, robo y acoso sexual. Ha cumplido condenas en las prisiones de Aïn Sebaa y Al-Arjat, y recientemente ha reincidido en actos similares contra otras víctimas.